dimecres, 30 de gener del 2008


Avui no tinc massa ganes de dir massa...potser podem deixar els pensaments en forma d'imatge. De vegades les paraules no surten com voldríem, expresar-nos costa...

dimarts, 15 de gener del 2008

Recuerdo de India hace justo un año...


Fue en India, justo en una de sus playas que asoman al Índico, donde toqué con las yemas de mis dedos la felicidad..y al mismo tiempo que me daba cuenta de ello, tomando consciencia de la magnitud del momento, percibía también la relatividad del tiempo.

En Gokarna, aquel pueblecito costero de la provincia de Karnataka, el tiempo se paró. Este momento coincidió con el descubrimiento de un sitio impensable, alumbrado por un sol resplandeciente…y mi momento coincidió también con el de aquellos que, cómo yo, pasaban sus días en alguna sencilla cabaña de caña o caucho. Se nos paraban los minutos, las horas resbalaban…Entendí, en algún punto, la belleza de las personas que habitan este pueblo y este país, sus almas tranquilas, hospitalarias, sus miradas llenas de sentido.

Allí en Gokarna, rodeada de las personas que en aquel momento formaban mi universo, mi ser era otro…era Clara en India, perdida, lejos de occidente, de mi vida, de mis gentes. Era una Clara en un contexto de belleza suprema, con la puesta de sol de trasfondo. El escenario perfecto, la compañía perfecta, el tiempo perfecto.

Nunca olvidaré India. No olvidaré jamás la sensación de incomodidad que pasé en Varanasi, cerca de ese Río que está vivo…esa ciudad de cielo enrarecido, impregnada de un olor a muerte milenaria, una ciudad que pesaba tanto que no pude aguantarla más que 3 días. Varanasi se te mete dentro, te inquieta, te mueve…

No olvidaré tampoco la región de los Rajás, el Rajastan de palacios y ciudades de colores. Odié profundamente la India de ciudades polucionadas y pobreza insultante.

Amé profundamente la India de sus gentes, la India espiritual. Poco a poco, día tras día, semana tras semana, aprendí algo de lo que significa ese país. Un poquito, muy poco quizás, pero suficiente como para devolverme la sonrisa los últimos días que pisaba sus calles.

Cuando vuelves a tu cotidianidad caes fácilmente en el error de olvidar las enseñanzas que la cultura ajena te ha facilitado, abriendo el camino para enfrentarte contigo mismo.Retomamos rápido la espiral del tiempo y ritmo occidental y nos dejamos un poco de lado. Y ahí está el quid de la cuestión...conocerse a uno mismo abre infinitas puertas a una vida más plena y sencilla.

En está página podréis ver más fotos mías de la India:

http://www.flickr.com/photos/klaruki

dijous, 10 de gener del 2008


Sobre Blow up

Hace poco volví a ver, y ya van tres veces, está maravilla de Antonioni…me fascina Antonioni. Todos y cada uno de sus filmes. “Blow up” es una película de 1966 que relata el descubrimiento de un asesinato por parte de un fotógrafo a través de la ampliación de sus fotografías. Lo mágico de esta cinta viene aquí; una vez más el director italiano juega con el concepto entre el ser y no ser, el estar y no estar…el protagonista, nunca presencia el crimen en la realidad…es a través de las imágenes que lo descubre. Al final, se abre ante nosotros la duda; ¿existe o no el asesinato?.

Un film sin música, con una sobreactuación algo esperpéntica de David Hammings y Vanesa Redgrave, donde se repiten una y otra vez las claves del lenguaje cinematográfico de Antonioni; el juego con el fuera de campo, los planos largos, las atmósferas condensadas…Una cinta de colores chirriantes y estética casi psicodélica de las que dejan huella.

Y con ella: La Aventura, Zabrisky Point, El Eclipse…

diumenge, 6 de gener del 2008

La innocència perduda i la nit de reis


La nit de reis era la nit més emocionant. Els nervis, ben a dins de l’estòmac, fent-me pessigolles cada cop que pensava en l’endemà i el menjador farcit de regals. Recordo la seva arribada, en les carrosses guarnides, i nosaltres, els petits de la casa, baixàvem de casa l’àvia provistos de cadires per veure’ls passar, res, cinc minuts, per davant nostre. Els caramels que ens llençaven i la lluita per agafar-los. Recordo el fred a les galtes d’aquelles nits de reis ja una mica llunyanes.

Després, ja a casa, les meves germanes i jo, preparavem la recepció. Hi crèiem tant en la visita de Ses magestats!En línia, una al costat de l’altra, disposavem les copes amb una mica de vi, i al terra, un cubell d’aigua pels assedegats camells.

Ja al llit costava aclucar els ulls…a cada moment semblava que els sentiríem. I la imaginació no parava de volar.

L’encanteri es desfeia al matí següent, quan descobríem tot aquell escampall de paquets que amagaven joguines de tota mena. Ens llevàvem més d’hora que mai per saber si els nostres estimats proveïdors d’il.lusions ens havíen portat els regals encomanats a la carta. Normalment quedavem contents…l’emoció i alegria eren tan fortes aquell dia!

Cap de nosaltres és massa conscient de quin moment va deixar de ser nen i de creure en els reis. Quina llàstima no endurse’n una miqueta d’aquella nit màgica amb l’edat adulta!. Jo no tinc fills, però suposo que l’esperit es recupera una mica amb els més petits.

La nit de reis és un dels meus enyors d'infància

dissabte, 5 de gener del 2008

Nancy, Nenuco y barriguitas


A veces pienso que me quedé encerrada en el tiempo cuando alguien me invita a jugar a la Playstation y renuncio a la partida por parecerme:

a) Aburrido

b) Complicado

c) Not my business

Entonces recuerdo que mis orígenes en el mundo lúdico se remontan a una infancia ochentera basada en muñecos que se han convertido en entrañables. Nancy, qué guapa era, con sus vestidos; jugábamos a bañarla, vestirla y meterla en la cama. Nenuco, el bebé que lloraba y hacía pipí. O el universo interminable de las barriguitas…

Ahora que lo pienso, nos inculcaban, con dichos juguetes, valores algo anticuados de familia y papel de la mujer. Ya de pequeñas teníamos nuestros bebes-juguete, mientras mis hermanos jugaban con los míticos clics de playmobil, construían fortalezas y planeaban ataques con ellos.

Bueno, bueno, pese a esos valores que se encerraban tras los juguetes de los ’70 y ’80, continuo pensando que los niños de mi generación crecimos desarrollando la imaginación, bastante más de lo que lo hacen la mayoría de los niños de hoy. No estoy en contra de las playstation ni de los juegos por ordenador (evidentemente los tiempos cambian), pero creo que aquellos juegos de mi infancia tenían un punto más inocente, más tranquilo y humano que los que corren por ahí hoy en día. Aunque tampoco tengo muy claro a qué juegan ahora los más pequeños... Confieso que mi contacto con el mundo infantil es bastante limitado, por no decir nulo.

Está claro que me quedé atrapada por los efectos de la nostalgia y ahora le saco el polvo a esos muñecos que tanto me acompañaron de pequeñita.

Por cierto, se me olvida decir que mi distracción infantil preferida fue siempre la lectura…era un poco rara yo de niña.

dijous, 3 de gener del 2008


Avui, sense més, un dels meus poemes...

TÁCTICA Y ESTRATEGIA


Mi táctica es

mirarte
aprender como sos
quererte como sos

mi táctica es

hablarte
y escucharte

construir con palabras
un puente indestructible

mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
pero quedarme en vos

mi táctica es
ser franco
y saber que sos franca
y que no nos vendamos
simulacros
para que entre los dos
no haya telón
ni abismos

mi estrategia es
en cambio
más profunda y más
simple
mi estrategia es
que un día cualquiera
mo sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites.

Mario Benedetti